Las opiniones son altamente diversas acerca de lo que es y lo que a dejado de ser el Vive Latino,la mía era un tanto parecida ademas de que económicamente no estaba estable por lo mismo la decisión de comprar un boleto este año para el Vive Latino me tomo un tiempo tanto que fue de ultimo momento, busque en la red un buen postor y conseguí un boleto para el sábado el mismo día a las 2 de la tarde, su costo fue de $600 que en comparación con los de la empresa encargada de venderlos el precio estaba accesible, sin embargo llegue a oír rumores de que es día abrieron taquillas y los boletos estaban a un muy bajo precio.
Para las 5pm ya me encontraba cerveza en mano escuchando ese tema que lleva a miles de espectadores a sacarse las prendas y agitarlas en el aire «Kilometros» de los Caligaris que siempre es un espectáculo , así fue como nos recibió este vive,no tenia mas de una hora en el lugar cuando gotas de hielo bautizaron esta edición del festival como «Vive Granizo» y esque el clima llevo al extremo de parar la música por 15 minutos almenos en el escenario Union Indio donde DOCTOR KRÁPULA formaba el slam a pesar de el nombrado clima.
Por fortuna el mal clima no duro mucho tiempo y en cuestión de minutos ya teníamos el sol encima ademas de la música de la carpa Gozadero que en general recibio muy buenos comentarios.
A diferencia de otros años el escenario principal concentro mi interés lo que me evito los clásicos traslados corriendo de un lado a otro.Entre el gran silencio y la maldita me recordaron épocas de slam para abrirle paso a Calle 13 que quedo debiendo varios temas y donde al igual que René me saque de pedo con el wey que se subió a abrazarlo o a ahorcarlo.
Los Tigres Del Norte eran un extraño aderezo para cerrar el día pero sin sobrepasar las expectativas o recurrir a muchos invitados lograron mantener a un buen numero de personas cantando e incluso bailando en la explanada principal del Foro Sol sus dos invitados por si tenian la duda Andres Calamaro que no estaba del todo enterado de las letras de los Tigres y la malfita o un hibrido que lleno el escenario para cerrar el sábado.
Al final del día el gasto en boletos, mezcales y cervezas valió la pena pero no fue la mejor celebración de XV años a mi parecer.
Las Fotos fueron tomadas con la cámara de un Tamagochi (Celular).
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